Los seres humanos estamos hechos para conquistar nuestra tierra y el universo de todos.
Análisis genéticos recientes de la humanidad indican que todos los seres humanos provenimos de exactamente dos lugares ubicados en Africa.
Hasta antes de la pandemia, se pensaba que la tierra ancestral de todos los humanos vivos se encontraba en el sur de África, al sur del río Zambeze (Nature, 2019), mayoritariamente en Botsuana, con pequeñas partes en Namibia y Zimbabue, según estudios de fósiles con 200 mil años de antigüedad (BBC).
Investigaciones posteriores a la pandemia, basadas en el uso de ADN ratificaron que el hombre moderno se originó en el norte del actual Botsuana en las mismas fechas (200.000 años) en una región hoy árida, que en su tiempo atesoraba un complejo sistema de lagos que dio lugar a un ecosistema fértil (National Geographic).
"Pero ahora, apoyados en un poderoso modelo computarizado y el análisis de datos genéticos, científicos en Canadá y Estados Unidos sugieren que venimos de múltiples grupos ancestrales esparcidos por varios puntos de África. En concreto, de al menos dos poblaciones que coexistieron en África durante un millón de años antes de mezclarse por el continente". (BBC).
"No sabemos dónde vivían, pero estaban lo suficientemente lejos unos de otros como para que se dieran pequeñas diferencias genéticas entre los grupos", le dijo a BBC Mundo Brenna Henn, una de las autoras del estudio de la Universidad de California Davis, en Estados Unidos.
Nuestro ADN no es único, por tanto, en el origen, y nos convoca a pensar en que la guerra y las alianzas, así como el ser políticos y trabajar en alianzas fue parte del desarrollo de la humanidad desde hace cientos de millones de años.
LA PERMANENTE ALIANZA ENTRE EL LINAJE CRIOLLO Y EL UNIVERSAL
Es imposible pensar, entonces, con evidencia científica de ADN, en un único "ADAN". Hoy por hoy, con los datos más recientes (Mayo, 2023), sabemos que nuestro linaje no es único.
Quizá podamos pensar en ADAN como algo más antiguo, pues los fósiles aún indican que nuestras especies humanas modernas surgieron en África al menos hace más de 300.000 años. Esa es la fecha origen del fósil más antiguo encontrado que podría pertenecer al origen del humano moderno.
La imagen más parecida a ADAN que tenemos, por tanto es la que antecede, basada en una reconstrucción compuesta de los primeros fósiles de Homo sapiens conocidos de Jebel Irhoud en Marruecos, basada en escaneos microtomográficos computarizados de múltiples fósiles originales.
ADAN, EVA, Y LAS ALIANZAS DINAMICAS NATURALES (ADN) DIGITALES POSITIVAS (@+)
Nuestro modelo ADN@+ es, como hemos escrito en anteriores artículos, algo político, al crear acción de alianza dinámica, natural, siempre digitalmente, en positivo.
La naturaleza de la humanidad nos ha llevado a aprender que, genética y digitalmente, el crecimiento de la Red Santa Cruz se parece al caso de un padre y una madre, donde la genética de la red, como la de la humanidad misma, se compone de dos linajes que se juntan (no en millones de años como ocurriría en la naturaleza) en pocos años (como ocurre hoy digitalmente) para crearnos, y de allí en más, crear nuestro nuevo destino humano, de modo de reproducir un patrón de red capaz de conquistar política, ambiental, cultural, económica y socialmente el universo, vía diálogos y alianzas, más que vía cruces de consumidores de vida infinita por la reproducción de su genética generación tras generación.
El orden natural de las cosas nos lleva hacia la familia, los hogares, y la unión de dos genéticas que naturalmente se reproducen; esa es la descripción que se ha podido computar con modelos complejos realizados en Europa y América, con data de Africa, de modo de llegar a reproducir la realidad actual con datos genéticos de fósiles y seres vivientes, creando un mapa genómico de cómo somos luego de 300 mil años de evolución.
El modelo de la familia humana y el cruce de ADAN y EVA, ha sido computado y eso es lo importante para el futuro digital, pues nos brinda una estructura que puede acelerar nuestro desarrollo, al enseñarnos que podemos crecer en nuestras campañas políticas, ambientales, culturales, económicas y sociales, como lo haría una red formada por una malla iniciada a partir de dos tallos gruesos de vid humana, entrelazados entre sí hasta los ramales más pequeños que siguen mezclándose día a día.
NO SE PUEDE CAMINAR EN SOLEDAD
Nuestro ADN@+ (ADNPlus) requiere que nos sumemos a trabajar juntos. Esto es, por tanto, lo más lejano a un "DNA" de un ADAN que lleve las siglas de una familia, o de un hijo único, o un heredero divino de una familia rica.
La ciencia nos indica que incluso la política se hace mejor en sumas, en unidades de múltiples genéticas, y es que la sobrevivencia requiere más bien adaptarse y adoptarse con lo más cercano a uno, dentro de una red humana diversa y noble igualmente, que se habrá auto-diseñado digitalmente para rear patrones que nos indiquen la mejor ruta para expandirse global y universalmente por cientos y miles de años, que es lo que buscamos como Red Santa Cruz (RSC).
LA POLITICA Y EL CRECIMIENTO
La política, por tanto, al ser una actividad humana, debe seguir el patrón de crecimiento genético de la humanidad, debiendo crear alianzas "matrimoniales" para sobrevivir y adaptarse a los nuevos desafíos de las conquistas de territorios bajo un poder unificado.
Las realezas centradas en la herencia genética tienen poco futuro hoy, en los países, pues todos los modelos computables muestran que la falta de diversificación mata los abolengos a través de los años, hasta llegar a un punto en el cual los apellidos que se repiten demasiado terminan siendo una curiosidad histórica tras una o más guerras locales o globales. Tarde o temprano, la rancia política, y el post-moderno ambiente, junto con la evolución de las culturas, las economías y las sociedades, nos enseñan que la única forma de sobrevivir es abrir las casas de poder real a la llegada de otros, diferentes, que con lealtad a principios y con capacidad de creación de valores, pueden crear espacios comunes donde podrán coexistir los nobles de abolengo.
En los procesos democráticos modernos, donde la realeza tiene un rol más bien secundario, el principio de las alianzas sigue estando presente, y va más allá de la sangre real y los santos griales de los apellidos nobles, o las riquezas enormes, o las causas territoriales de varias décadas o un par de siglos.
Hoy se busca el crecimiento del poder a través del crecimiento de la fama en comunidades locales y destinos globales. Los políticos modernos deben poder hablar con varios acentos, tener múltiples razas que les acepten, y deben ser aptos para gobernar entre los diferentes puros criollos de cada comunidad.
No basta con el localismo o el nacionalismo que solo ha transcurrido sus años en los espacios de un cantón, provincia, o nación, sino que las experiencias deben adquirirse desde otros espacios para mezclarse, creando nuevas alianzas, con nuevos talentos globales que han pasado varios años en espacios universales, entendiendo y haciendo suya la identidad, la cultura y el futuro, a través de su vida y la vida de sus herederos intelectuales, familiares y profesionales en más de dos continentes.
LO GLOBAL ES LO ACTUAL EN POLITICA
Crecer a través del diseño de un programa de política republicana criolla, atada a un territorio nacional no será nunca eficiente, pues la movilidad humana le resulta, a dichos modelos de desarrollo, algo contraproducente.
Ciertamente, la cultura está atada al territorio y sus realidades, por lo que tampoco se puede diseñar una política democrática globalista, atada a un conjunto global de principios universales, pues dicho diseño tampoco será eficiente: la sed de arraigo humano le resultará, a dichos otros modelos de desarrollo, algo igualmente contraproducente.
Por ello, la política moderna crece en la humanidad misma, que está cada vez más dividida entre republicanos nacionalistas y demócratas globalistas.
POLÍTICA DEMÓCRATA Y TECNOLOGÍA REPUBLICANA
Las redes tecnológicas están tomando cuenta de esto y están adoptando el modelo de red con al menos dos vides originarias: 1) la republicana, nacionalista y territorial, que crece enredada políticamente con 2) la demócrata, globalista y universal. El diálogo de cohesión entre 1 y 2, al final es como la alianza entre Adán y Eva: lo natural, pues lo contrario será la guerra de polarización inercial.
Hacer las PACES entre ambas secuencias genómicas políticas implica hacer experimentos capaces de establecer un contenido y un continente capaz de articular los intereses nacionales con los globales, y estos últimos dentro de los intereses universales de una humanidad que se proyecta para vivir en al menos 6 de los espacios donde se juega hoy la geopolítica: la tierra y el agua (los dos originales previos al siglo 20), el aire y el espacio exterior (los dos añadidos por el siglo 20), y la identidad corporal personal, sumada a la identidad mental personal (los dos espacios añadidos a la geo-política por la digitalización del siglo 21).
La conquista de la identidad, como algo capaz de ser conservado como una república personal independiente es el nuevo campo de batalla, no solo mental, sino físico, y en ello, la economía de la convergencia ha comenzado a trabajar intensamente tras mostrarse, con la pandemia, que la humanidad es capaz de clonarse más allá de lo físico, para convertirse en parte de un Metaverso, donde la política también deberá clonarse para poder capturar y mantener no solo el dinero de unos, sino el poder con todos.
El ADNPlus nos muestra que no solo debemos trabajar con linajes y en sumas, sino que debemos desarrollarnos digitalmente incluso en lo político.
¿HASTA DONDE SE PUEDE LLEGAR DIGITALMENTE?
Según ha desarrollado Salazar (2023) en su trabajo de investigación del ADNPlus desde 2020, su mundo actual está conectado de tal forma que un prolífico autor, creando y publicando, como una sola persona, a través de un medio propio digital, puede proyectarse física, mental y globalmente.
El punto de convergencia ya no es un trabajo de siglos o décadas, sino uno de varios meses, hasta acelerar la creación de una comunidad capaz de proyectarse globalmente.
Cuando una familia rica tras otra comienza a copiar tu modelo, es momento de volver a innovar. La envolvente de la data muestra que si trabaja así de manera sostenida durante 5 a 10 años consecutivos, con disciplina hasta crear un liderazgo regado en una región y un continente, se puede no solo desarrollar contenidos apropiados para una estrategia de globalización, sino que se puede volver con fuerza al punto de origen, para expandir la red hacia las raíces locales, creando un modelo esférico de crecimiento, que te lleva de vuelta hacia el punto de origen, mapeando cuál es tu radio de acción con claridad numérica.
Durante la pandemia (2020-2022), Salazar -como la mayor parte de la humanidad- no pudo viajar físicamente a mantener reuniones de diálogo para la cohesión y para hacer las paces en comunidades bajo influjos locales vs globales, y dio un giro hacia la digitalización de su quehacer dialogante, manteniendo su base física en Chile, pero reconectándose digitalmente con su país de origen, Ecuador.
Este trabajo permitió mirar, sorpresivamente, una cantidad de externalidades lectoras provenientes de los lugares hacia y desde donde los Chilenos y Ecuatorianos migraron y regresaron con más fuerza: EEUU, España y México.
La data del experimento ADN@+, mantenido en www.adnplus.co.uk es rastreable a través de datos de 6731 vínculos a publicaciones creados en 3 años, 4 meses, y 8 días (1244 días), con un promedio cercano a 5 vínculos creados por día desde una persona, usando su propio medio, y 4 redes de difusión principales, centradas en tecnología.
El experimento consistió en trabajar solo, sin ayuda humana, salvo la de la tecnología gratuita disponible, y sin invertir en publicidad, de modo de poder entender naturalmente hasta cuántas personas se podía llegar en 3 años de trabajo. La meta era llegar a 1x2x3x5x8x13 usuarios (al menos 3120 usuarios fijos) en el periodo 2020-2025.
La meta se cumplió 10 a 1 en menos de 3.5 años. Redes similares, digitales, creadas sin presupuesto a partir de una red social basada en fraternidad colegial, han alcanzado la meta lógica y matemática de crecer en una progresión geométrica a la Fibonacci en 5 años:
(Datos de red del Colegio San Gabriel de Quito)
Otros grupos, comerciales, centrados en redes de ADN territorial binacional han alcanzado un nivel más en la secuencia, apuntando, en equipo, a 65520 como meta a 10 años, al contar ya con 24000 usuarios asociados:
La generalización del experimento personal de Salazar, lo ha llevado a tener una comunidad ADN@+ con 30 mil lectores, de los cuales se tiene 7216 contactos, siendo 2849 de ellos quienes están suscritos permanentemente, cumpliéndose en más de 90% la meta, medida por suscriptores, y en el doble la meta si se mide por audiencia con datos de contacto, y en 10 a 1 la meta en cuanto a lectores usuarios.
El experimento también se puede medir por vistas únicas de páginas:
En este caso, se tiene más de 20 mil vistas únicas de páginas de usuarios que retornan, mismas que sumadas a otro tanto similar de vistas únicas de páginas de usuarios nuevos, entregan más de 40 mil vistas de páginas únicas regadas en 5 continentes, pero enfocadas en América principalmente.
Es interesante notar que la lectura por página en promedio es de casi 5 minutos en América del Sur, y que apenas 2.46% de las entradas rebotan, con lo cual se puede apreciar un trabajo de calidad suficiente como para crear, con más recursos y equipo, un contenido de impacto, como se desea, en los próximos años.
Salazar comentaba a ADN@+ que, "el mantener una disciplina de trabajo de creación de contenidos casi diario", le llevó a la conclusión de que podía, sin vivir en su país, mantener cercanía con los de su querencia un 54% de las veces, y le permitió lograr algo adicional, que no le permitían antes los viajes: tras 3 años pudo llegar a identificarse con un 25% de una audiencia local.
El casi 80% de su lectura basada en dos raíces (Ecuatoriana y Chilena) coincidía con el ADN criollo de su origen y el ADNPlus de su destino de parada inicial con miras hacia un trabajo global y universal.
Al apuntar y pensar lo global desde su lugar de residencia, pudo mirar procesos migratorios y tener datos de hacia dónde apuntaron sus compatriotas dobles en crisis, mostrando evidencia de que EEUU y España eran los lugares a los que había que apuntar.
¿DORMIRSE EN LOS LAURELES O TRABAJAR EN EQUIPO?
Toda persona debe dormir al menos cuatro horas, un emprendedor deberá tratar de dormir al menos 5 a 6 horas para poder estar sano y fuerte, y la persona promedio del planeta deberá dormir 8 horas para poder trabajar físicamente bien. Mientras los seres humanos descansamos, las máquinas y la tecnología pueden mantener nuestros espacios digitales de trabajo siempre abiertos, con 100 a 200 personas visitando nuestros espacios virtuales de vida.
Estar activos en las mañanas, sobre todo en los inicios de las semanas (contando a los Domingos como dichos arranques), nos llevará a tener cerca de 500 personas activas en nuestros espacios digitales. Estar atentos al trabajo digital los días Jueves también será valioso, pues los contenidos nuestros deberán orientarse hacia el ocio del fin de semana "ampliado" global, de modo de estar compenetrados con los demás en eso de no solo trabajar, sino en la lógica de generar bienestar y descanso necesario en la forma no solo de ser, sino de hacer las cosas.
Tal como se ha visto en los dos gráficos anteriores, trabajar de la forma anterior ha llevado a que ADN@+ pueda cubrir ya no solo Ecuador, sino Chile, Estados Unidos, España y México, conformando audiencias con 53.6%, 24.8%, 8.6%, 1.4% y 1.1% respectivamente, hasta llegar al 89.5% del universo de lectores, con un potencial cercano a 10% para el resto del planeta.
¿A CUÁNTOS LECTORES SE PUEDE LLEGAR TRABAJANDO SOLOS?
Google Analytics Universal cambia en menos de quince días a Google Analytics 4. La pandemia y la consecuente migración de todos hacia el Metaverso nos ha obligado a todos y cada uno a evaluar nuestro funcionamiento bajo el viejo modelo normal de hacer política, y prepararnos políticamente para pasar a la nueva normalidad: la de la política analítica y un ADN superior: ADNPLUS@+, digital y siempre positivo:
Los diversos experimentos de economía de la política que hemos realizado nos llevan a saber que una sola persona, trabajando constantemente, pero sin capital, ni anuncios de mercadeo digital, por al menos 2 horas diarias promedio de su tiempo en pro de su emprendimiento digital por 40 meses, puede llegar a 30 mil usuarios, más de 50 mil sesiones, con rebote inferior al 10% y duración cercana a 1 minuto.
En el mejor de los artículos, ADN@+ pudo llegar, en un solo día a 1000 usuarios, y en el segundo mejor de los artículos o eventos, se pudo superar los 500. Al menos 4 artículos pudieron llegar a 400 usuarios diarios, y una decena de artículos pudo llegar a 200. La media estuvo más cercana a una lógica de "centurión": 100 personas promedio diarias como capacidad de liderazgo personal.
Sin capital, un negocio digital que vende intangibles, debe verse como una tienda o un bar, al cual ingresan en promedio 100 personas al día, y de las cuales unas pocas consumirán contenido, con una suficiencia de lectores de los cuales se pueda entablar negocios con 1 de cada 5 (cumpliéndose la regla de Pareto), pudiéndose cerrar negocios con 1 de las 100.
La productividad de esta forma de hacer negocios es suficiente como para que el emprendedor digital mantenga una vida con su hogar, pero no le permitirá ahorrar.
¿ANUNCIARSE COMERCIALMENTE O TRABAJAR POLITICAMENTE?
Para crecer comercialmente, se puede hacer ofertas; para crecer mediáteicamente se puede hacer crecer escándalos, y para crecer políticamente, se puede ganar batallas. Ninguno de estos tres elementos está en el plan de ADN@+.
La evidencia muestra que los temas de agregación de valor creativo, técnico y político, sumado a la lógica de inversión de impacto y la creación de una red poderosa de promotores e inversores es el camino, sobre todo trabajando entre Quito y Santiago, en infraestructura, creando seminarios, tranquilidad, apuntando a la asamblea, explicando lo que hacen otros poderes y países, y claro, financiándose en red.
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