
El Pacto Ganadero Sostenible
- ADN@+

- 23 jul
- 3 Min. de lectura
🐄 URKU B:
URKU B es una invitación a crecer con trazabilidad, producir con propósito y prosperar desde el territorio. Nace desde el compromiso de la Federación de Productores Ganaderos Sostenibles Kayambis, en alianza con el ecosistema Sierra|ANDES, el Consorcio “Alimentando el Futuro” y la red de trazabilidad URKU, como una forma concreta de construir bienestar familiar, regeneración ambiental y flujo económico organizado.
Todo comienza en el Año 0, cuando el productor federado realiza la compra de URKUs por 1.000 dólares, equivalentes a 55 litros diarios de leche durante cinco años, valorizados a un centavo por litro. Esta acción activa la trazabilidad personal del productor y lo integra a una comunidad productiva que crece con orden, acompañamiento y confianza. Al completar el ciclo, el productor recibe 1.500 dólares, reflejando el valor de su participación y el tiempo comprometido.
En el Año 1, se implementa una inversión ganadera regenerativa de 8.200 dólares, destinada a establecer una nueva hectárea viva: pasto mejorado, agua disponible, cercas inteligentes, infraestructura adecuada y tres vacas seleccionadas por su potencial productivo. Todo se realiza con acompañamiento técnico de la Federación, alineado con el cuidado del páramo y la mejora continua.
En el Año 2, la hectárea entra en operación. A partir del mes 18 del modelo, comienza la producción de leche. Con un rendimiento base de 10 litros por vaca al día, se generan ingresos mensuales de 468 dólares. Con 12,5 litros, los ingresos suben a 585 dólares. Si se alcanzan los 15 litros, se proyectan 702 dólares mensuales. Y al llegar a los 20 litros por vaca, el ingreso mensual es de 936 dólares. La leche se comercializa dentro del Consorcio “Alimentando el Futuro”, que conecta directamente a los productores federados con una demanda diaria organizada de 60.000 litros, bajo trazabilidad digital.
Durante los Años 2, 3 y 4, el productor contribuye mensualmente con 300 dólares como parte del compromiso productivo trazado. Esta contribución es constante, clara y está pensada para sostener la expansión de la red, el acompañamiento técnico y la estabilidad operativa del modelo. En todos los escenarios productivos, el ingreso mensual generado por la hectárea es suficiente para sostener esta contribución y dejar un excedente disponible mes a mes para la familia.
Al llegar al Año 5, el productor alcanza la madurez completa del modelo. Su hectárea ganadera regenerativa ya está consolidada: produce de forma sostenida, protege el páramo y genera ingresos libres todos los meses. A esta altura, el flujo mensual es pleno, la trazabilidad está activa, y el retorno por la trazabilidad inicial se entrega como reconocimiento al pacto cumplido: 1.500 dólares que fortalecen la base económica familiar.
URKU B se construye con visión de largo plazo, pero se concreta año a año, paso a paso, litro a litro. Cada productor federado que lo activa se integra a una red viva que valora el tiempo, la tierra y el trabajo bien hecho. La Federación acompaña, el territorio responde, y el sistema fluye con equilibrio.
URKU B es una hectárea organizada, protegida, productiva. Es trazabilidad con propósito. Es ingreso con identidad. Es regeneración territorial con rostro humano. Y todo comienza con un acto de confianza: comprar URKUs, activar la trazabilidad y formar parte del pacto.
¿Eres parte de la Federación Kayambi y quieres activar tu hectárea?
Súmate. Participa. Produce. Traza tu ingreso.
URKU B: tu tiempo, tu tierra, tu flujo.
¡ADelaNte! Siempre!!










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